miércoles, 17 de marzo de 2010

La filosofía de vanguardia y el pensamiento avanzado


La filosofía de vanguardia (para algunos, filosofía de alto rendimiento) nació como tal a raíz de mis observaciones sistemáticas acerca de la extraordinaria similitud en determinados comportamientos banales de la mayoría de las personas. Es decir, de la inquietud científica que me provoca el conocimiento de la tontura humana. Siendo así y para poder comprender a la perfección este amplísimo campo aún sin explorar, me vi en la necesidad de implementar la insuficiente potencialidad de la filosofía convencional con un elemento nuevo, moderno y altamente eficaz: el pensamiento avanzado. Esta versátil herramienta de reflexión, el p. avanzado, me acompaña en el día a día allá por donde voy y me ha servido entre otras cosas para formular respuestas de complejísima resolución tales como: ¿por qué en las procesiones de Semana Santa en Andalucía todo el mundo come pipas? u otras aún más fascinantes y difíciles como ¿por qué en los restaurantes chinos todo el mundo pide para comer rollo de primavera, arroz tres delicias y pollo al curri? La filosofía de vanguardia, edificada sobre los poderosos cimientos del pensamiento avanzado, me ha abierto todo un mundo de posibilidades al estudio más elevado de la increíble capacidad del ser humano para acometer actos recurrentes y/o en determinadas ocasiones absurdos, de semejante magnitud, que para beneficio de todos, merece ser compartida.


3 comentarios:

  1. Hola niño,,,una cosa que yo me pregunto??Porque a mi no me vendieron el piso con la canica esa que todo vecino tiene,,,sii!!esa a las que a las 12 de la noche siempre suena con un buen golpe y rodando despues,,,,jejjejeje,,,,a que nunca lo habias pensado??me encanta tu blog,,muchas gracias por invitarme,,,muakksssss.Jésus(hermanilla de Andrés)

    ResponderEliminar
  2. Hola ,,yo siempre me he preguntado porque las mujeres trabajan y hablan a la vez?? y los hombres estas dos cosas las hace por separado??

    ResponderEliminar
  3. Lo de los chinos es cierto, y es que en el fondo los españoles no queremos salir de nuestra gastronomia, y decimos "vamos a un chino a comer", aunque en realidad no aprovechamos lo que los chinos nos pueden aportar gastronómicamente. Parece que tenemos miedo de comer lo que no conocemos, por eso pedimos lo que nos parece mas casero.

    ResponderEliminar